Nos conocimos repentinamente
Y sin querer… todo cambió.
No estaba planeado.
No lo buscaba.
Solo estaba leyendo una historia en Wattpad, como cualquier otra tarde.
Y de pronto, sin saberlo, encontré algo más que una historia.
Vi un link. Uno de esos que normalmente ignoraría.
Pero algo me dijo: “vamos a ver qué pasa”.
Así que entré. Me uní.
Y ahí estabas tú.
Fuiste tú quien habló primero
“Si te vas a quedar en el team, ¿qué CH vas a ser?”
Yo no sabía qué responder.
Te dije “déjame pensar 😩”
Y lo pensé…
Te dije “Alemania.”
No sabía que con esa palabra te iba a desbloquear recuerdos.
No sabía que justo en ese momento, en medio de personajes y casualidad,
estaba comenzando nuestra historia.
Al principio no planeaba quedarme.
Solo era un rato, solo era un team.
Tú tenías novia.
Y aunque sí me gustaste un poco desde el inicio…
casi te veía como una amiga más.
Pero los días pasaron.
Y sin darme cuenta, empecé a quedarme más tiempo.
A quererte más fuerte.
A sentir que tu nombre me sonaba diferente en el pecho.
Y el 20 de enero…
después de tanto hablar y compartir silencios dulces,
me preguntaste si quería ser tu novia.
Ese día fue como un “clic” suave en el alma.
Y dije que sí.
Porque sin querer,
ya me había quedado contigo mucho antes
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Y si pudiera volver atrás…
Lo haría igual. Todo igual.
Volvería a leer esa historia.
Volvería a entrar a tu perfil.
Volvería a hacer clic en ese link.
Volvería a decir “vamos a ver qué pasa”.
Volvería a entrar al team.
A decir “déjame pensar 😩”.
A elegir Alemania.
A hablar contigo sin imaginar nada.
Y lo mejor es que, incluso sabiendo que tú no sabías todo lo que ibas a significar…
tú también elegiste quedarte.
Eso fue lo más bonito de todo:
que no fue suerte.
Fue destino… pero disfrazado de casualidad.